Upload
La tecnología al servicio de la inmortalidad humana (para quien puede pagarlo)

Lo más atractivo de la ciencia ficción es que nos ha permitido imaginar y hacer apuestas acerca de cómo será el mundo en el futuro. En este sentido, Upload es una serie que aprovecha este género y no escatima en imaginación para llevar las posibilidades al límite, proponiendo una y mil situaciones que podrían llegar ocurrir en las sociedades del mañana.

Todo comienza cuando Nathan (Robbie Amell) tiene un accidente en su auto inteligente, algo que —según se tiene conocimiento en su entorno— es prácticamente imposible.

Presionado por su novia Ingrid (Allegra Edwards), Nathan accede a “descargar” sus memorias para extender digitalmente su vida, gracias a una tecnología revolucionaria que tiene lugar en el año 2033.

Pero incluso cuando la humanidad se apronta a alcanzar uno de los grandes sueños de todos los tiempos, la inmortalidad, el capitalismo salvaje se hace presente, marcando diferencias entre quienes pueden pagar un mejor o peor “cielo virtual”.

Esta producción original de Amazon Prime Video cuenta con diez episodios en total, de media hora de duración aproximada cada uno.

Upload es una serie que transita entre la ciencia ficción y la comedia romántica, que avanza rápido y entretiene. A la vez, nos deleita con numerosas ideas ingeniosas y fantásticas.

El precio de la eternidad

¿Cuánto vale la vida eterna? Pues el servicio tiene un costo bastante alto.

Entre quienes tienen escasos recursos, la única posibilidad es habitar en una miserable realidad virtual conocida como “2 gigas”. En cambio Nathan, auspiciado por su millonaria novia, accede a Lakeview, una de las estancias más lujosas.

En consecuencia, deberá vivir perpetuamente en una suerte de suite de hotel, en un paraje virtual que imita un bosque ideal bañado por aguas cristalinas. Ah, y por cierto, aquí está prohibido trabajar.

Pero no todo es color de rosas para él, ya que al mismo tiempo tranzará su libertad, pasando a ser completamente dependiente de Ingrid.

Bienvenido al cielo

Una vez que las memorias han sido descargadas, todo es oscuro… vacío. Hasta que de pronto, una voz se atreve a darle forma a esta realidad virtual. “Hola Nathan. No espero que me respondas aún, el sistema está procesando mucha información. Pero voy a contar hasta tres, intenta contar conmigo…Uno, dos, tres… Bienvenido a Upload Nathan”.

Aquellas palabras las dice, desde su oficina y cómodamente sentada frente a un ordenador, Nora (Andy Allo). Ella es una asistente para los recién descargados, funcionando como una suerte de servicio al cliente o ángel, como prefieren llamarlo dentro de este ciber mundo.

Este cielo virtual de lujo ofrece un montón de alternativas: desde futuristas terapias con animales, hasta la posibilidad de tener relaciones sexuales con personas vivas, todo gracias a la avanzada tecnología.

Pero también tiene cosas malas como anuncios insistentes o paisajes tan maravillosos, que terminan siendo poco creíbles. Lo peor de todo es, sin duda, la falta de privacidad. Ya que desde una oficina en el mundo real, alguien está viendo todo el tiempo lo que haces.

Para el protagonista de esta comedia, sin embargo, lo mejor de Lakeview es su ángel, Nora. Ambos generan una complicidad que sólo se ve truncada por una sencilla razón: ella pertenece al mundo de los vivos y él, al de los muertos.

El lado oscuro de la tecnología

Al poco andar en este nuevo plano, Nathan se da cuenta de que le faltan algunos recuerdos. Con la ayuda de Nora descubre que algunos de sus archivos de memoria están dañados. Entonces nace la sospecha de que su muerte no haya sido un accidente, sino un asesinato.

Es ahí cuando se da espacio para el despliegue de todos los usos malignos que se le pueden dar a la ciencia. Hackers con el poder de, por ejemplo, alterar la trayectoria de un vehículo o de traficar memorias a cambio de altas sumas de dinero.

Al mismo tiempo, la tecnología Upload no está exenta de opositores. Mientras parte de la sociedad protesta para que se decrete como un derecho humano sin distinción monetaria, están quienes se reconocen como luditas, es decir, que se niegan a los avances técnicos.

Una cuestión interesante se da entre Nora y su padre (Chris Williams). Ella quiere asegurarle una plaza en Lakeview. En tanto él, prefiere morir “a la antigua” y dirigirse al incierto cielo de los cristianos, para reunirse con su esposa, quien murió antes de que se desarrollara la tecnología para descargar memorias.

Una reflexión superficial

Upload plantea cuestionamientos interesantes, como qué haríamos ante la posibilidad de perpetuar nuestra existencia o si, por ejemplo, al morir nuestro cuerpo muere también nuestra alma. ¿Existe el alma o algo similar? ¿Se le puede llamar vida a lo que ocurre en un universo programado digitalmente?.

Incluso cuando todas estas preguntas son apasionantes, Upload no profundiza demasiado en el drama que conllevan. La trama se mueve más bien por el carril de la comedia, exagerando las situaciones al máximo y llevándolas incluso al ridículo.

Upload es el gran proyecto de Greg Daniels tras haber liderado éxitos como The Office y Parks and Recreation.

Esta serie no está nada mal, aunque todavía queda mucho por ver. Por el momento se podría decir que esta primera temporada fue un buena comienzo y demostró que tiene gran potencial.

¿Dónde ver Upload online?

La serie está disponible completa en Amazon Prime Video. Upload ya fue renovada para una segunda temporada.