Protagonizada por un grupo de afroamericanos, la serie Atlanta evidencia un contexto marcado por el racismo y la discriminación en Estados Unidos, con personajes que a pesar de las constantes dificultades, luchan por mantenerse a flote.
Construida sobre un escenario pesimista pero fiel a la realidad, Atlanta se muestra como la cúspide de todas las dificultades que puede enfrentar un descendiente afroamericano en territorio estadounidense, aún en pleno siglo XXI, ofreciendo una lectura crítica, pero alimentada con gotas de comedia.
A pesar de considerarse como una mezcla inusual, la serie logra transmitir con naturalidad el ambiente hostil en el que se desenvuelven los personajes principales, en el que muchas veces el humor asoma como único desahogo.
La premisa es clara. Ser negro en Norteamérica sigue siendo muy complicado, y ningún objetivo se cumplirá con facilidad.
Donald Glover (Community), creador y protagonista, demuestra que el racismo se convierte en solo uno de tantos obstáculos para lograr sueños cada vez más esquivos, lo que obliga a doblegar los esfuerzos.
El humor oscuro y en ocasiones incómodo, nos lleva a reflexionar incluso sobre si es correcto reír, sumergiendo al espectador en un verdadero carrusel de emociones.
La historia detrás de Atlanta
La serie fue producida en 2016 por la cadena televisiva FX, recibiendo una gran aceptación por parte de la crítica especializada, con una calificación de 8.6 en el portal IMDb y un 97% de aprobación en Rotten Tomatoes.
En Atlanta, Earn Marks (Donald Glover), golpeado por una vida desafortunada, ve en su primo rapero Paper Boi (Brian Tyree Henry), la oportunidad de sacar adelante a su familia, por lo que busca convertirse en su productor y representante.
Ambos, afrodescendientes y con decenas de oportunidades arrebatadas por su origen, parecen estar acostumbrados a desenvolverse entre malas noticias, por lo que no mantienen muchas expectativas en torno a esta incipiente oportunidad.
Afortunadamente, su labor como productor comienza a dar buenos resultados en el mercado, encontrando después de mucho tiempo, el éxito que buscaba y necesitaba.
Sin embargo, una vez que el dinero ya no escaseaba, los estereotipos aún latentes en las calles siguieron siendo un impedimento para recibir un trato igualitario, demostrando que es una temática en la que aún queda mucho por trabajar.
Sin perder de vista las injusticias, la serie también analiza las limitaciones que se autoimponen quienes pertenecen a la comunidad de color, como una consecuencia de la precariedad que provoca el racismo.
Estructura narrativa y fusión de géneros
Atlanta es una serie que, en términos generales, no sigue una estructura marcada en el desarrollo de sus episodios. Más bien, recorre diversos estilos narrativos para expresar las ideas, entregando una experiencia dinámica para la audiencia.
Así es como encontramos capítulos que rompen con el relato y no tienen mucha relación con el anterior, y que transmiten su propio mensaje, sin perder las bases críticas que caracterizan el argumento.
Aunque el género más marcado es el drama, la producción muestra secuencias de máxima tensión que bien pueden catalogarse como suspenso o incluso terror, cada uno llevado a cabo con una excelente ejecución.
El uso de colores grises y tonalidades más bien frías, nos mantienen inmersos dentro de un contexto oscurecido por las injusticias, recordándonos en todo momento el ambiente que prima alrededor, Atlanta.
Si bien su objetivo no es precisamente hacer reír, la serie fue galardonada con dos Globos de Oro y dos premios Emmy en la categoría Comedia, evidenciando un gran desempeño en la realización y producción de la historia.
¿Dónde ver Atlanta online?
El éxito llevó a Atlanta a ser considerada para el catálogo de Netflix, donde puedes encontrar todos los episodios disponibles.