The Baby Sitters-Club trata sobre grupo de amigas que se une para empezar un pequeño negocio, cuidando a los hijos de sus vecinos. Esta nueva producción original de Netflix se basa en una famosa saga de libros juveniles; el resultado es una serie nostálgica y a la vez fresca.
La inspiración llega de repente, algunos genios dicen que debe pillarte trabajando y otros lo definen más como un golpe de suerte inesperado. Lo que le pasó a Kristy (Sophie Grace), en The Baby-Sitters Club se parece más a lo segundo.
Todo comenzó un viernes, después de clases. Kristy planeaba ir a una pijamada en casa de su amiga Mary-Anne (Malia Baker). Mientras, su mamá (Alicia Silverstone… Sí, la eterna Cher de Clueless ahora interpreta a la mamá) busca desesperada a alguien que cuide a su hijo menor.
Páginas para buscar niñeras, agencias, teléfonos móviles que no contestan… “Cuando yo era niña y mi mamá necesitaba quien nos cuidara, tomaba el teléfono, llamaba a alguna chica del vecindario y ella venía. Era parte del contrato social”, dice su madre angustiada.
Entonces Kristy tiene una idea, según sus palabras, “la mejor idea de mi vida”. Así comienza su emprendimiento, que desde un principio bautiza como “El Club de las Niñeras”.
Esta historia, recientemente adaptada a serie por Netflix, se basa en una popular saga de novelas homónima, escritos por Ann M. Martin y publicados entre 1986 y 2000.
El Club de las Niñeras se hizo tan popular que alcanzó a vender 176 millones de copias, para luego ser adaptada a distintos formatos, que van desde novelas gráficas hasta largometrajes.
La versión de Netflix fue desarrollada por dos exponentes sobre la construcción de personajes femeninos en la TV: la showrunner del show es Rachel Shukert (GLOW) y la productora ejecutiva Lucia Aniello (Broad City). Además, la misma Ann M. Martin figura como productora de la serie.
Ante todo, amigas
Mary-Anne, Claudia, Stacey y luego Dawn son las primeras integrantes del Club presidido, obvio, por Kristy. En esta serie cada episodio está narrado por una niñera distinta, lo que nos permite conocer mejor la vida interior de cada una de ellas.
Kristy es mandona y controladora, pero eso porque tiene que lidiar con problemas de abandono; Su mejor amiga Mary Anne, en cambio, es más callada y madura, y fue criada solamente por su papá tras la muerte de su madre.
El personaje de Claudia (Momona Tamada), en tanto, causa conmoción. De ascendencia asiática, tiene gran interés por el arte y la moda, es única y genial. En las novelas The Baby-Sitters Club también fue la favorita del público, incluso Netflix le dedica un pequeño documental titulado El Club de Claudia Kishi, sobre el impacto del personaje.
Por su parte, Ashley, sufre de diabetes y tendrá que aprender a aceptarlo sin dejar que esto afecte su seguridad y autoestima. Finalmente Dawn, acaba de llegar a la ciudad tras el divorcio de sus padres y tiene que lidiar con una madre desorganizada.
El emprendimiento de las niñeras va creciendo lentamente, entre fiestas, dulces, pijamadas, desencuentros y aprendizajes.
El mayor mérito de The Baby-Sitters Club es el retrato natural de estas chicas y de su interioridad, en un mundo donde su entorno les refuerza que pueden sentirse seguras de que lograrán todo lo que se propongan.
The Baby-Sitters Agency
Ser niñera tiene sus dificultades. Algunos clientes son irresponsables o tienen hijos complicados. Algunos niños pueden escaparse y perderse, y otros complicarán a su cuidadora presentando signos de fiebre. Para todos esos inconvenientes una niñera estrella debe estar preparada.
Pero hay un problema para el que estas chicas no estaban listas: la competencia. Al poco andar de su negocio, un grupo de jóvenes mayores que ellas lanzan un compañía idéntica, The Baby-Sitters Agency.
Las competidoras tienen ventajas comparativas por su edad. Pueden, por ejemplo, quedarse hasta más tarde o conducir un auto en caso de cualquier emergencia.
A pesar de todo, El Club de las Niñeras logra hacerle frente a sus rivales. Su sello, que las diferencia, es el de siempre ser “una buena amiga” y a través de la sinceridad, ganarse la confianza de los adultos de su comunidad.
Por su herencia, The Baby Sitters Club tiene una esencia clásica, que nos hace sentir como en casa. Al mismo tiempo, salpica con audacia el guión de comentarios feministas sencillos y directos, cargados de inocencia. El resultado es una serie nostálgica y a la vez fresca.
¿Dónde ver The Baby-Sitters Club?
Todos los capítulos de la serie están disponibles en Netflix.